miércoles, 29 de mayo de 2013

2. I'm only thinking about this girl I'm seeing

Esa tarde Alex la pasó ordenando cosas junto a su nuevo 'padre' y su nueva 'hermana' Bueno, Grace también ayudaba.
Esas horas que habían pasado juntos habían hecho que la joven cogiera mucha confianza con los dos nuevos miembros, ya que se mostraban naturales con ella, sin atosigarla demasiado a preguntas, y haciendo que se sintiese muy a gusto e integrada en aquella unidad familiar.
Además, con Robin tenía un especial afecto, ya que compartían gustos musicales y a veces se enfrascaban en conversaciones sobre baterías de ciertos grupos o las canciones que tal banda interpretó en tal concierto.
Y con Sophie... Era necesario pararse a mirarlas, ya que ves a Sophie entablando una conversación con Alex propia de una chica de dieciséis años. En serio, todo un personaje, pero a pesar de que intentaba aparentar una actitud madura, no podía evitar que a veces se le resaltasen aspectos infantiles, porque a pesar de todo, era una niña.

Si esto era tener una familia, con dos unidades paternas y al menos una fraternal, a Alex le encantaba.
Y pensar que creía que era increíble cuando vivían su tía y ella solas... Pues no, había descubierto que aquello de formar una familia la llenaba, y mira que solo llevaba... ¿Unas cinco horas en esa casa?

Solo había un problema... Un problema con muchos rizos.
Harry.
El muy c****** ni se había molestado en salir de su cuarto para ayudar aunque sea un poco.
A ver, que si Alex no le cae bien pues vale, pero aún así por temas de humanidad. Podría ayudar a su padre, a su hermana, a Grace, pero nada, se encierra en su cuarto en una burbuja de autista que no se la quita nadie.
De verdad, los chicos con esa actitud le reventaban a Alex.

Pero mejor dejarlo pasar. Que los gilipollas sean gilipollas, y que los demás, vivan su vida a gusto.


(...)


Por el momento, la joven chica descansaba en su nueva habitación, que por cierto era perfecta para ella. Tenía las paredes justo como ella las quería, verde claro, y los detalles del cuarto alternaban rastros blancos y beiges, pero nada de cursilerías ni ñoñadas. Una habitación perfecta para ella y punto.

- ¡Alex, a cenar! - gritó su tia desde abajo.

Vaya, a penas unas horas en esa casa y ya parecía que Grace había adoptado la faceta de mamá de familia. Qué rápido todo, ¿no?
Bueno, considerando que la boda de ella y Robin era en un mes, pues tenía que ir todo muy rápido.
¿En un mes? Pues sí, mira, lo que hace el amor, que te comportes como si todo fuera rapidísimo, como si te hubieran petado el culo con un cohete.

- ¡Ahora bajo! - gritó ella a modo de respuesta.


Mientras tanto, el chico de aquel pelo rizado tan característico, salía de su habitación en ese momento. Bajó las escaleras silbando feliz. 
¿Feliz?
Sí, era raro, pero iba feliz. ¿Y por qué? Nadie sabe. Este chico era todo un misterio, nunca se podía saber con certeza lo que se le pasaba por su cabeza.

Llegó al salón, y ahí estaba su hermana Sophie, viendo Hora de Aventuras en la tele. Corrió hacia ella y se tiró encima, haciendo que la pequeña se quejase.

- ¡Harry! ¡Que estoy debajo!

- Vaya, no me había dado cuenta - dijo apartándose mientras se reía.

- Tonto... - agredió ella. Pero rápidamente se le cambió la cara y volvió su sonrisa a ella - ¿A que Alex es super guapa? - al oír eso Harry también cambió la cara, pero de forma contraria, pues puso una mueca no muy agradable. A ver, sí, la chica era guapa, pero no tenía ese puntillo que hacía especiales a ciertas chicas. Era una chica mona y punto. Aunque tenía una sonrisa bonita, y un cuerpo bastante definido, pero su carácter e impertinencia superaba a todo.

- He visto mejores. - contestó el chico a modo de respuesta. 

- ¿Así? ¿Cómo quién? - Harry pensó y dijo la primera chica que se le vino a la cabeza.

- Pues Cecilia.

- ¿Cecilia? - Sophie hizo como si vomitara - Me cae mal. Es una mandona, y se cree la mejor del mundo.

- Ya, a mí tampoco me agrada mucho... - reconoció el chico.

-¿Entonces por qué la has dicho?

- A ver, es muy guapa.

- Todas las chicas que se comportan cómo unas víboras pierden su belleza - Harry miró con el ceño fruncido a su hermana.

- ¿Desde cuándo te has vuelto más madura que yo?

- Desde que piensas con el pene - el chico abrió mucho los ojos.

- ¡Sophie!

- ¿Qué? ¿Qué? - dijo la niña haciéndose la loca - Yo no he dicho anda, eh - pero después le salió una pequeña sonrisa. Menudo bicho estaba hecho. A saber dónde había aprendido eso...

Entonces, en aquel instante, Robin y Grace salieron de la cocina.

- Oh Harry - dijo la mujer - Estás aquí. Vamos a cenar.

- Ah sí... - respondió él y miró a su padre. - Es que se me olvidó decir que hoy es el cumpleaños de un amigo, papá de Niall - aclaró para que supiese quién era - Y pensábamos cenar todos juntos - mentira. El cumpleaños de Niall era en una semana, justo el viernes de la semana que empezaban el instituto, y este iba a celebrar una fiesta, pero Harry quería una excusa para no quedarse en casa y cenar con aquella hermanastra repelente que le había tocado. Robin miró a Grace y luego a su hijo.

- Pues... Harry... - dijo su padre.

- Venga, Robin, es joven - empezó a decir Grace - que vaya con sus amigos, que seguro que el del cumpleaños quiere que Harry esté. - Al joven se le iluminó la cara. 

Definitivamente Grace le caía bien. El problema era con Alex. Robin miró indeciso a Harry pero luego soltó el aire.

- Vale, venga, cena fuera, pero no llegues muy tarde, ¿vale? - el chico asintió feliz.

- Gracias, ¡gracias! y gracias Grace - la sonrió - Y bueno... Lo siento por lo de esta tarde... De verdad.

- No pasa nada - dijo ella - Supongo que esto no te será fácil para ti, pero haremos que sea lo más ameno posible. - Harry se acercó a ella y le dio un beso en la mejilla a señal de agradecimiento. Después volvió al sofá con su hermana, que estaba enfrascada en la tele.

- Enana, un beso que me voy - ella acercó la mejilla y le miró.

- ¿A dónde te vas?

- A cenar fuera.

- ¿Por qué?

- Es el cumple de Niall.

- ¿Pero su cumple no era el 13 de septiembre? - Harry la miró fijamente deseando que su padre y Grace no hubiesen oído nada, la niña, como era muy lista, lo entendió - Ah, vale, entiendo. Pero con una condición.

- ¿Cuál?

- Yo no digo nada si tu eres majo con Alex - Harry la miró incrédulo, pero sabía que contra su hermana uno no podía tener la voz dominante, asi que resopló y asintió.

- Vale, intentaré llevarme bien con ella.

- Entonces todo bien. Que te diviertas en el cumple de Niall - finalizó ella marcando las últimas palabras mientras le guiñaba un ojo.

Y tras esto, Harry salió de su casa, maldiciendo el día en el que su hermana decidió empezar a ser tan puñetera.



Unas horas más tarde, Harry y sus amigos, que eran Liam, Louis y Niall, el famoso "cumpleañero" se encontraban en un pub en el que el director era amigo suyo, por lo que podían entrar ahí sin peligro ninguno, y beber alcohol como si estuviesen aptos para ello.

- No aguanto a Alex - dijo Harry mientras se bebía un chupito, sacando ese tema, que no lo había tocado en toda la noche.

- ¿Alex? - preguntaron todos confundidos.

- Mi nueva hermanastra - en cuanto dijo eso puso una mueca y chascó al lengua.

- ¡Es verdad! ¡Que hoy llegaba! - dijo Louis, haciendo ver que todos se habían olvidado de aquel matiz.

- ¿Y por qué la odias? - preguntó Niall.

- Pobrecita, segur que en el fondo es maja y todo, pero que tú la tratas de mala forma. - Dijo Liam. Harry le miró frunciendo el ceño, pero prefirió contestar a lo de Niall.

- Es repelente, va de guay por la vida, es de estas chicas que les da igual todo, va de sobrada... Uf, no la aguanto.

- ¿No llevas ni un día con ella y ya piensas eso? ¿Qué te ha hecho la chica?

- Pues nada... Simplemente que no me cae bien y punto - los tres amigos se miraron cómplices. Conocían a Harry perfectamente, y en la mayoría de los casos, empezaba a sacar conclusiones de la gente que no eran ciertas, ya que Harry siempre se fiaba de las apariencias, y no de lo demás.

- Pero vamos a lo que importa - dijo Niall - ¿Está buena?

- Mmm, ¿qué ha pasado con el Niall cuidadoso, educado, que no es vulgar, y tal? - preguntó Liam sonriendo.

- Ah claro, como soy rubio y adorable y toco la guitarra, ya debo ser un niño bueno, ¿no? - todos le miraron sonriendo. Sabían lo que iban a decir ahora, y es que ellos tenían una frase preparada de excusa para cualquier cosa que hacía Niall.

- No, es porque eres irlandés - dijeron a coro, después empezaron a soltar carcajadas. Les encantaba decir eso, no sabían por qué, pero un día lo dijeron y desde entonces se quedó la tradición de que la razón de todo era que Niall era irlandés.

- Maldigo el día en el que os dije de donde venía... - dijo Niall entre dientes, pero después empezó a reírse con los demás.

- Oye, a todo esto no has respondido - dijo Louis. Todos miraron atentos a Harry esperando su respuesta.

- Uf... Pues está normal, como cualquier otra chica.

- Vamos, eso significa que está buena que te cagas pero que no la quieres compartir - dijo Liam. Louis y Niall asintieron y Harry puso los ojos en blanco.

- ¿Tienes alguna foto de ella? - preguntó Niall. Harry negó la cabeza, pero siempre se le dio muy mal mentir, y sus mejores amigos le conocían como las palmas de su mano.

- ¡Sí que tienes! - dijo Liam- ¡Enséñala! - Harry resopló, pero sabía que si sus amigos no veían la foto, se acabarían poniendo muy pesados. El chico de rizos cogió su móvil y buscó y buscó, hasta que encontró al foto.

- Me la envió mi padre para que viera como era ella - dijo mientras la enseñaba a los chicos. En esa foto Alessandra salía en un lugar soleado, difícil de descifrar, ya que la luz casi borraba el paisaje. Ella llevaba una camiseta de tirantes gris, pero estaba parcialmente tapada por el pelo que la caía liso sobre los hombros. Junto a su pelo revuelto, le añadimos la piel morena que en esa foto mostraba y una pequeña sonrisa con unos perfectos dientes blancos entre unos suaves y rosados labios, que se colocaban entre abiertos, y, acabando la composición, unos pequeños ojos verdes, que le daban un toque misterioso pero a la vez pícaro a la chica. Harry debía admitir que en esa foto ella salía muy bien, bastante guapa, y que cuando la vio por primera vez se quedó maravillado, incluso cuando la vio en persona pensó que era más guapa cara a cara que en la foto, pero su amargo carácter le echó para atrás, ya que como bien dice su hermana, las chicas que son unas víboras, pierden su belleza. Y Hary estaba seguro de que Alex era una de esas chicas.

- Tío, es un pivonazo - dijo Louis en cuanto vio la foto. Todos le dieron la razón.

- Me la pido - añadió Liam con una sonrisa.

- No, en cualquier caso me la pido yo, - aclaró Niall - que Liam tú ya tuviste tu época de folleteo vario - el susodicho, al escuchar esto esbozó una pequeña y pervertida sonrisa.

- No Niall - dijo Louis - que tú ya tuviste demasiado con la italiana que te ligaste en julio. Me toca a mí, que hace tiempo que no... eso.

- ¡Chicos! - dijo Harry - Nadie se la va a pedir ni nada. - se miraron entre ellos.

- Harold... - dijo Louis subiendo y bajando las cejas - ¿Estás celosón? - Harry le miró con cara de odio.

- ¿Tú que te fumas? Mira, por muy mal que me caiga, es en cierto término mi hermana, y no me apetece que os la paseéis entre vosotros como si fuera un pedazo de carne.

- No, si yo no dejaría que se pasease, me la quedaría para mí solo... - dijo Niall, pero Harry le miró frunciendo el ceño. - Vale, vale. No intentaré nada con ella.

- Así me gusta.

- Espera espera espera - dijo Liam - ¿Vas a vivir en una casa, con esa chica de infarto, soportando cada vez que esté en pijama, que salga de la ducha, que se levante, que esté en ropa interior, y te vas a saber controlar?

- A ver, yo no tengo intenciones con ella, ni nada, así que tampoco me será difícil llevarlo.

- ¿Y va a ir al mismo instituto que nosotros? - preguntó Louis. Harry asintió. Tanto Niall, como Liam como Lou se miraron entre ellos y se rieron.

- Malik - dijeron a la vez.

- ¿Qué? - preguntó Harry.

- Que más vale que tengas a tu querida hermanita alejada de Zayn, que lo más probable es que vaya a por ella.

- Bueno, si ella quiere estar con Zayn que esté con él - dijo Harry.

- ¿Y por qué ella sí y yo no? - dijo Niall.

- Pues no sé, ay que pesados que sois...

- Harry, una cosa - dijo Liam - Eres consciente de que si Cecilia se entera de que Alex vive en tu casa y tal, se va a pillar un buen cabreo y que probablemente le coja asco a la chica, ¿no?

- Mira, los problemas que puedan o no tener entre ellas ya no son mis problemas.

- Menudo hermano... - dijo Louis, pero luego le sonrió y le revolvió los rizos a Harry, quien se quejó.



(...)



Aquella mañana Alex se despertó más feliz de lo normal. Entre que hacía calor y podía ponerse pantalones cortos, y entre que vería a su prima, su cuerpo estaba lleno de júbilo.

Antes de bajar a desayunar, se vistió ya que Victoria la recogería sobre las once y media de la mañana y eran... ¡Las once y veinticinco! Total, que cuando acabó de vestirse, (CLICK AQUÍ PARA VER ROPA) fue al baño, se aseó un poco, y se retocó el pelo. El día anterior se había hecho ondulaciones en el cabello, y aún las conservaba, además estaban no muy definidas, justo como le gustaba a ella. Después, volvió a su cuarto y cogió sus gafas de sol favoritas, con un estilo parecido al de John Lennon, y un sombrero muy veraniego, que ya que hacía calorcete, pues lo aprovechaba bien.
Y así, más feliz que una perdiz, bajó las escaleras, pero se le borró la felicidad cuando en la cocina, vio a un chico con pelo rizado de espaldas y en pijama.

Intentó no hacer ruido, para que no se diese cuenta de la presencia de la chica, pero como casi todo en esta ida, le salió mal, por lo que el chico se dio la vuelva y la miró, primero de cabeza a los pies, y después de pies a cabeza.

- Me gusta tu jersey. Gatos. - dijo Harry aún con la mirada en ella.

- Vaya, si parece que me hablas. ¿Y lo del espacio, vidas aparte, burbujas y tal? - el chico resopló.

- Solo intentaba ser amable.

- Pues ayer no empezaste con buen pie - se quedaron en silencio. Alex fue a la nevera y sacó uno de estos zumos pequeños de manzana que viene con pajita, y empezó a tomárselo - Ayer no te vi por la noche. - dijo ella un poco seca.

- Llegué tarde, estaba con unos amigos. 

- Ah.

- ¿Por? ¿Querías verme? - dijo Harry con un tono un tanto irritante para ella.

- Ni en tus mejores sueños, rizos. - a Harry se le cambió la cara a una seria. No le gustaba que le llamaran así. Solo Sophie, Liam, Louis y Niall podían llamarle 'rizos'. Nadie más. Sin decir nada, se acercó al frutero y cogió un plátano. Le quitó parte de la piel y le dio un gran mordisco.



- Sí, tu traga, traga - dijo Alex con doble sentido.

- Pero qué cerda eres. A saber lo que tragas tú.

- Trago de lo que tú no tienes - contestó ella con una sonrisa y sintiéndose un poco triunfante. Dicho esto, el chico resopló. - Oye, ¿y Robin y mi tía?

- Se han ido a pasear con Soph. Grace dijo que mejor no despertarte que podrías levantarte de muy mal humor y no era bueno.

- Que bien me conoce. - Alex fue hacia la basura para tirar el tetrabrik del zumito, y cuando lo hizo, llamaron a la puerta.

Rápidamente se encaminó hacia la entrada, pero Harry se la adelantó.

- ¿A quién esperas? - dijo Harry.

- A mi novia - contestó Alex super seria intentando sonar convincente. Harry tragó saliva.

- Ah... Que tú eres...

- Mira que eres imbécil - dijo Alex soltando una carcajada. Ay madre como le gustaba vacilarle. El timbre volvió a sonar.

La joven abrió la puerta, y tras ella, estaba una chica castaña, de piel fina y clara, y con unos grandes ojos azules, que hacían que ella entera brillase. Decir que esta chica era guapa definitivamente era quedarse corto. Era la típica chica que podría ser el prototipo de chica para cualquier chico. Parecía dulce y angelical, de estas personas que no habían roto un plato en su vida. Pero obviamente todo, como en esta vida, no es lo que parece, pues en ella, a pesar de tener ese aspecto de niña buena, tenía un punto que hacía que uno notase el peligro en ella.

- Joder - fue la primera palabra que dijo, con una suave voz. Con los ojos hizo un repaso a Harry de arriba a abajo. - Lex - así llamaba a veces a su prima - me dijiste que el chico era guapete, pero no que estaba como un tren.

A Harry se le escapó una risa. ¿De verdad le había dicho eso Alex a aquella chica? Vaya, parece que aunque la joven le odiase, seguía pensando como todas las chicas que él era un chico agraciado.

- Hola Vics, calladita estás más guapa - dijo Alex.

- ¿Nos vemos tras nueve meses y me saludas así? - habló Victoria con una sonrisa ladina.

- Cállate guarra.

- Guarra tú.

- Puta.

- Zorra.

- Casquivana.

- Prostiputifurcia.

- Meretriz de campo.

- Con bragas de esparto - finalizó la chica castaña. Después se miraron y se echaron a reír, a la vez que se abrazaban. Entre ellas estas cosas eran normales, lo de insultar de broma y tal, lo veían más como un juego. En cambio Harry estaba flipando. Menudas locas tenía enfrente, y la loca dominante obviamente era Alex. Parece que cuanto más guapa, más trastornada. Espera, ¿más guapa? Ay Dios Harry. Ya empezaba a delirar un poco. Esa chica le parecía del montón, ni más ni menos, solo una chica que va con los humos subidos, a ver si alguien se los bajaba de una vez. - Oye, ¿no nos vas a presentar?

- No. - contestó secante Alex. Salió a fuera de la casa e intentó cerrar la puerta pero Harry se lo impidió.

- Soy Harry. - le tendió una mano a Victoria.

- Victoria, pero todos me llaman Vicky, o Vics, o Vi, como les salga.

- Tomo nota - dijo Harry.

- Asi que tú eres el hermanastro al que Lex llama gilipollas ¿eh?

- Puede ser. Ella dice muchas cosas que no piensa, yo creo que es un problema que tiene en la cabeza o algo así.

- Mmm ¿te callas o te callo de una hostia? - le gritó Alex. Vaya, sí que saltaba con poco la chica.

- Bueno, pues Harry - habló Vicky - Me has caido bien por ahora, bueno, mayoritariamente, y por muy guapo que seas o bueno que estés, no voy a dejar que le hagas nada a mi prima, ¿vale? Porque conozco muchas torturas a la hora de dejar a un hombre sin miembro viril - Harry frunció el ceño - Pero por ahora no te preocupes mucho por eso, yo solo lo dejo caer, que siempre es mejor avisar. Venga, adiós, que tenemos cosas que hacer - Victoria rápidamente se acercó a Harry y le dio dos besos en las mejillas, después se unió a su prima y empezaron a andar, sin volver la cara, dejando a Harry más que confundido. Menudas dos alocadas que se iba a llevar encima, ya veía la que se le iba a avecinar.



(...)



- Es tu estilo - dijo Victoria cuando llevaban ya buena parte de la ciudad recorrida. Habían pasado por delante del centro comercial principal, por varios parques, dos cines, varios institutos, entre ellos el de Alex y otro que era el de Vics, ya que desgraciadamente iban a ir a distintos centros, también habían pasado por las calles principales, y ahora iban de camino hacia la playa, para dar un paseo por la arena.

- ¿Mi estilo? ¿Quién? - preguntó Alex.

- Harry. Alto, potente, guapísimo, castaño, y con ese aire de cabroncete que no se lo quita nadie.

- Uy sí, vamos, y se te olvida lo de que me pone más un chico si es mi hermanastro.

- ¿Asi que si no fuese tu hermanastro tendrías algo con él?

- ¡No! Es un completo gilipollas, en serio. A mí o me dan a chicos bien puestos o nada, nada de imbéciles gratis, en serio.

- Pues chicos bien puestos hay pocos, ya te puedes poner a buscar.

- O vendrán a mí - dijo Alex con una sonrisa.

- Sí, sí... Oye, me voy a acercar a esa tienda a comprarme un Nestea, ¿quieres algo? - Alex negó.

- No gracias.

- Vale.

- ¿Te espero aquí?

- Como quieras.

- Vale sí, te espero aquí.

- Ahora vuelvo.

- Okeys.


Alex se quedó esperando a que su prima viniera. Miró hacia delante y vio la playa, con el brillante mar. Quedaban apenas unos pequeños pasos para llegar a la arena. La verdad es que el lugar era muy muy bonito, incluso se atrevería a decir que más que Londres. Por una parte no se arrepentía de estar ahí.
Mientras pensaba en esto, una ráfaga de viento se apoderó del sombrero que tenía la chica en la cabeza, tirándolo al suelo.

Alex rápidamente se agachó, antes de que volviese a salir volando, paro no se percató de que una mano también había intentado cogerlo.
Levantó la vista apartándose las gafas con una mano a la vez que se sujetaba el sombrero con la otra, ya que ella al final había sido la que lo cogió, y se encontró con unos increíbles ojos azules.
Era un chico, de más o menos la edad de ella, con un pelo castaño claro elevado un poco y ciertamente descolocado, con la piel suavemente tostada, y lo que más lucía era una gran sonrisa que mostraba.

El chico en cuanto vio quién era se le formó aquella sonrisa que la chica admiraba. ¡Era Alex, la hermanastra de Harry! Mira por donde la estaba viendo en persona. Y era mucho más guapa que en las fotos, es más, estas se quedaban cortas. Y es que la chica era verdaderamente preciosa. Le había cautivado completamente.

- Gracias por intentar cogerlo - agradeció ella aún hipnotizada con sus ojos y sonrisa. Era verdaderamente guapo aquel chico.

- Tú eres Alex. - dijo él con suavidad.

- ¿Me conoces? - preguntó ella confundida.

- Soy amigo de Harry, vi una foto tuya - entonces a Alex ya le empezó a cuadrar todo.

- ¿Harry tiene amigos? - dijo irónicamente.

- Ya sí, todos nos preguntamos lo mismo. Quizá son sus rizos, que atraen - la joven soltó una pequeña risa, le caía bien ese chico. Había conseguido hacerla reír aun sin conocerla. - Soy Louis - le tendió una mano, que Alex aceptó.

- Encantada Louis.

- Y bueno, ¿qué tal en la nueva ciudad? ¿Te entiendes?

- Sí, además mi prima vive aquí y me está enseñando todo.

- Vaya, mierda, me ha quitado el puesto de guía de la ciudad, y yo que quería enseñártela... - dijo haciendo que se ponía triste.

- Bueno, quizás algún día me la puedas enseñar de nuevo - FUCK. ¿Qué había sido eso? ¿Un comentario de tonteo? ¿Estaba tonteando? ¡Pero si ni le conocía apenas!

- Mmm, suena tentador, no me podré resistir. - la chica esbozó una sonrisa. - Bueno, Alex hermanastra de Harry - volvió a sonreír la chica, ese chico la agradaba - Me encantaría pasar más tiempo descubriendo cosas tentadoras tuyas, pero me da que si no llego a tiempo a mi casa con una barra de pan mi madre va a montar un alboroto y creer que me han violado por la calle - Alex frunció el ceño - Nah, es broma, pero desgraciadamente me tengo que ir.

- Que pena. Bueno, ya nos veremos, espero.

- Claro que sí - dijo Louis mientras se iba alejando - ¡Recuerda! ¡Sé donde vives! - Alex soltó una carcajada.

- ¡Lo tendré en cuenta! - el chico se volteó y prosiguió su camino. Alex no apartó la mirada de él en ningún momento. Además de guapo, simpático y encantador, tenía un buen cuerpo, y un trasero gracioso. Oh mierda, genial. Ahora también era una depravada mental.

Pero entonces Alex empezó a pensar que no iba a ser tan malo como ella pensaba lo de mudarse a esta ciudad.




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Jeloooou:)
He subido antes de la una de la mañanaa! Creo que esto es un record para mi ajajjaja
Bueno, que aquí está este mega capitulazo que lo he hecho macro largo y que eso, que eso es todo.
Comentad, disfrutas y a que son geniales el gif y la foto? AWSEDRFTGYHUJIKLPSXDCFVGBHNJMK
Bueno, que cualqueir cosa estoy en twitter @lidialechuga41 y en ask ask.fm/lidius1D
Besotes pa' toooos

4 comentarios:

  1. LIDIA! ya estoy aqi. en el otro no pude comentarte.
    Aver, llego al primer capitulo y digo: no son hermanos de sangre, saldran juntos.
    pero luego leo el segundo y digo: ¿Louis?
    por ahora esta muy bien. Esperando el sigiente!
    Besos

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  2. LIDIA tus novelas son geniales me encantan haz muchas mas
    B-R-A-V-O

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  3. HELLO,bueno,lo primero,que losiento por no comentar antes,no tuve tiempo .-. que si volver,las maletas,isla magica,volver,examenes etc....NO TENGO TIEMPO.
    Sabes? hoy lei los dos capitulos y me encantan.VAMOS esta novela ,me encanta,pero yo creia que saldria con Harry o si no Niall PERO LLEGO Louis y eso no me lo esperaba.Veras que lio me hago.Pero me encanta la nove :3 y bueno no tengo tiempo para una PARRAFADA.Losiento.
    BESOS,ABRAZOS.
    IVETA:)

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