miércoles, 3 de julio de 2013

12. Let me be you last first kiss.

Alex estaba en su cuarto mirando el armario. A ver qué se ponía mañana... No tenía ni idea. 
Ese día había pasado bastante rápido. Por la mañana había ido con Harry a clase, y en el pasillo había visto a Louis. En cuanto sus miradas se habían conectado, Alex recordó todos los momentos vividos el día anterior. Fue tan feliz... nunca pensó que iba a ser así cuando llegó aquí. La verdad es que esperaba algo peor, un martirio, una vida imposible. Y los primeros días, cuando Harry era amargo con ella, pensaba que sería así, pero conforme pasó el tiempo, se dio cuenta de las cosas iban bien, de que le gustaba como marchaban las cosas.
Con Bianca todo iba progresando. En clase se habia soltado un poco más, aunque seguía en su límite. 
Zayn... Bueno, le había vuelto a guiñar un ojo, se había acercado a Alex y compartido unas pocas palabras.
Luego ya en el recreo, ella y los chicos se pusieron en la misma mesa. Después otra vez las clases y la extraña desaparición de Liam... Para ver a Victoria...
Ya la llamaría por la tarde para preguntarla.
Cuando acabaron las clases ella se fue a casa. Allí comió con todos y después se encontraba en su cuarto mirando el armario.
Alguien llamó a la puerta de su cuarto.


- Pasa.


Harry se asomó sonriendo con un pendrive en la mano.


- ¿Malditos Bastardos? - Alex le devolvió la sonrisa.

- Entra. - cogió el ordenador y se sentó en la cama, con la espalda apoyada en el cabecero y las piernas extendidas, ordenador encima. Harry se quedó de pie en medio de la habitación - Venga, túmbate conmigo. - Harry asintió y se colocó tímido a su lado. - Dame el pen. - Harry se lo dio.

- Espero que funcione.

- Sí, mira, se ha encendido la lucecita - dijo indicando el USB.

- Vale, pues ahora pincha la peli. 

- Okey. - Alex le dio al archivo y empezó la película. Un fondo rosa culminó la pantalla durante un tiempo mientras empezaban a salir nombres - Harry... La peli no empezaba así... Ni ha aparecido el nombre de Quentin Tarantino ni nada...

- No sé, a lo mejor es algo que han puesto antes de que empiece, ahora saldrá algo - Alex asintió y esperaron, pero de repente salieron un hombre y una mujer, con no mucha ropa que digamos.

- Harry... ¿Qué es esto? ¿Qué...? ¡Ay Dios, pero...! ¡Joder! - y es que la película que estaba en el pen drive no era de estas películas aptas para niños, por decirlo así.

- No sé. Creía que me la había descargado bien.

- Pues no... Pero... ¡Ay que asco! ¿Has visto lo que están haciendo? Me cago en la leche.

- Yo... Yo me he perdido.

- Harry, quítala antes de que me muera del asco. - el chico se adueñó del portátil y quitó la película. Apartaron el aparato y se quedaron quietos, suspirando. - No se me va a quitar la imagen de la cabeza.

- Ni a mi.

- Que asco lo que hacía con las manos... Que raro...

- Ya.

- Y lo de los pies... ¿Cómo coño podía hacer eso con los pies? 

- Ni idea, y mira que esto a un chico se supone que le gusta, pero en este caso... Que asco.

- Podrías haber comprobado si era la película correcta al descargarla...

- Ya...Pero no lo hice... - ambos se quedaron en silencio, mirando a la nada. Pero tras un minutos, giraron las cabezas y conectaron sus ojos, e instantáneamente se empezaron a reír, a carcajada limpia, tato que les dolía.

- Madre mía...

- Ha sido gracioso.

- Si, lo admito... ¡Hostia!

- ¿Qué pasa? - dice Harry.

- ¡Mañana es el cumple de Niall!

- Sí, ¿y? ¿Agobiada porque no sabes que ponerte? ¿Se te ha secado el pintauñas? - dijo con ironía. Alex le dio un golpe en el hombro.

- Cállate. Me refería a que no le he comprado anda a Niall...

- A todo esto... Yo tampoco.

- Ah, muy bien. Es tu amigo desde hace años pero no tienes ningún regalo, muy bonito.

- Eh... Se me olvidan las cosas, ¿vale? - Alex se puso de pie y cogió su móvil, además de coger dinero. - ¿A dónde vas?

- A comprarlo.

- Mmm... Voy contigo, y así podemos comprar uno conjunto.

- Va, me parece bien. Te espero abajo.


Harry salió de la habitación y mientras Alex cogió lo que necesitaba. Bajó las escaleras y a los segundos bajó el chico, dispuesto a salir. Se despidieron de los demás, diciendo a dónde iban. Salieron de casa y comenzaron a andar hacia el centro comercial.


- ¿Tienes pensado qué comprarle? - le preguntó él cuando estaban entrando en el sitio.

- Que va. Supongo que... Comida, o comida, o... más comida.  Harry sonrió.

- La verdad es que yo también he pensando lo mismo.

- Venga, vamos a esa tienda, que seguro que encontramos algo. 


Alex agarró de la mano a Harry y tiró de él hacia Jack Wills, la primera tienda que vio que le pareció apta para el regalo de Niall. Entraron y empezaron a mirar cosas.


- ¿Qué te parece esta? - dijo Alex enseñando una camiseta verde con unas letras en blanco.

- Demasiado verde para Niall.

- Mmm es irlandés. Para él nada es demasiado verde - Harry resopló.

- Esa no, no se la veo.

- Vale. ¿Y esta? - Esta vez Alex cogió una camiseta blanca de manga larga con las letras "JW" en negro en la zona izquierda.

- Simple...pero muy Niall, le gustará.

- Perfecto, ya tenemos algo, vamos a pagar. 


Ambos caminaron hasta la caja y allí pagaron, bueno, pagó Harry y luego se harían cuentas. 
Alex caminaba por el pasillo con la bolsa, mirando de lado a lado, pensando en qué comprar. Harry la observaba atento. El pelo se movía de lado a lado, cayendo liso sin imperfecciones. Y sus piernas... Largas y morenas, que se movían paralelas. 

'No, no, no' pensó Harry 'es de Louis'.

Y es que en clase se sentaban al lado, y Louis le contaba con voz soñadora cosas sobre Alex. Harry ya se sabía de memoria cómo pasaron el día ayer en la playa. Que si andando, que si cogió a Alex, que si se mojaron, que si le apetecía besarla...

Urrrgh, eso no era bueno para él.


- Harry, ¿estás ahí? - él levantó la cabeza y se encontró con os ojos de Alex.

- Eh sí, claro. ¿Qué pasa? - a Alex se le escapó una pequeña carcajada y puso las manos en su cadera.

- El baile de la pasa - cantó lentamente a la vez que se movía. Harry la miró con el ceño fruncido.

- ¿Y eso?

- Nada, - dijo riendo - olvídalo, una cosa que hacía con Victoria de pequeña. - Harry soltó una risa.

- ¿Victoria bailando así de patético? No me la imagino. Ahora enserio, ¿qué ibas a decirme?

- Que he tenido una gran idea.

- ¿Cuál?

- A Niall le encantan esas zapatillas...

- ¿Las Supra?

- Sí, esas. Y seguro que por aquí las tienen.

- Sí, es más, sé donde, vamos. 


Ahora fue Harry el que la cogió de la mano y tiró de ella. Comenzaron a andar atravesando todo el centro comercial. Parece que la tienda estaba alejada. Al fin la encontraron y se metieron en ella. Miles de zapatillas había, de todas las marcas, de todo tipo. Se acercaron a la sección de la marca Supra y empezaron a mirar. Les llamó la atención unas que eran azules marino y blancas, Conociendo a Niall, no se las quitaría ni para cagar.


- Estas son perfectas - dijo Harry.

- La verdad es que sí. Le van a encantar nuestros regalos.

- Hacemos un buen equipo en esto de elegir regalos.

- Vaya honor - dijo irónica.

- Voy a pagar.

- Vale, yo ahora voy.


Harry se separó y fue a pagarlas, mientras Alex se dirigió hasta la sección de las Vans. Le encantaban esas zapatillas. Las había llevado siempre, y el hecho de que ahora fuese la moda no le gustaba mucho, ya que odiaba seguir el mismo patrón que el resto de la gente a la hora de vestir, pero aún así, ella nunca abandonaría sus queridas Vans. Eran como las Converse para ella. Por mucho que pase el tiempo, seguirán siendo los zapatos más usados.
Miró todos los modelos que había, muy hipster la mayoría. Se quedó mirando unas que la atraían. Eran unas Vans de plataforma ancha de color blanco, después la parte de arriba tenía el color rosa fosforito destacando, y en la punta y por la parte de detrás eran negras, además, en la zona oscura había tachuelas de pinchos plateadas.
Muy su estilo.


- Son bonitas. - dijo Harry apareciendo a su lado.

- Eh... Sí, bastante. - Alex se quedó mirándolas un rato más.

- ¿Vamos? - preguntó el chico.

- Sí, claro.


Comenzaron a andar, dispuestos a salir por la puerta principal, pero Alex se quedó parada.


- ¿De verdad te apetece volver a casa ahora? - dijo ella.

- La verdad... No. Tengo aún que borrar las imágenes de la peli porno esa rara. - Alex se rió y después miró a todos los lados.

- Tengo una idea.

- Me das miedo.

- Confía - le dedicó una sonrisa maliciosa y le cogió de la mano. Tiró de él y empezó a andar, hasta meterse en el McDonald's.

- ¿Vamos a comer?

- Hombre, si quieres comer, come, pero ese no era mi plan.

- ¿Y cuál era tu plan?

- Ya verás. -Alex se plantó delante del parque infantil del restaurante.

- Ni de coña me meto ahí, que huele a pies.

- Tómatelo como una aventura.

- Pero que no entro, que me doy con el techo.

- Pues te agachas. - Harry la miró con una ceja alzada, pero ella hizo pucheritos.

- Venga Harry, venga... - ella se acercó a él poniendo la barbilla en el pecho, mirándole con ojos de cachorro.

- Vale, entro... Pero como no me lo pase bien...

- Lo harás.


Alex volvió a agarrar a Harry de la mano y tiró de él. Primero tenían que meterse en el primer piso y después iban subiendo como unos escalones enormes, en los cuales había que agacharse, hacer movimientos de Spiderman y después ser ágil para subir. Alex se preguntaba cómo de pequeña le costaba tan poco atravesar ese castillo, mientras Harry se daba con todo lo que encontraba a su paso.


- Aún no veo la diversión por ninguna parte.

- Cállate agente Styles, estamos en una misión secreta. Nos van a descubrir.

- ¿Qué? ¿Qué dices?

- Ssssh. Agarra tu pistola, creo que viene alguien. - Alex se lanzó hacia una parte que era como un cubo pequeño, donde cabían dos personas de tamaño adulto. Harry la siguió de cuclillas. - ¡Cuidado! - dijo gritando pero susurrando. Con un brazo presionó a Harry contra una pared.

- ¿Que pasa? - Alex formó con sus manos una pistola, se asomó y apuntó a un niño moreno que iba por ahí, feliz.

- Es un mensajero de Voldemort, aliado de Cráneo Rojo. 

- ¿Estás mezclando Misión Imposible con Harry Potter y con Capitán América?

- Y con Batman, ya que el Joker nos espera abajo del tobogán. - Harry la miró confundido. Dios, se le iba la cabeza eh... El chico acabó sonriendo, contagiado por la locura de la chica.

- No son solo mensajeros, también son robots, mira - ahora Harry señaló a una niña con brakets.

- Que mala leche tienes... Yo también llevé aparato... - dijo Alex.

- Hay que salvar el castillo, vamos. - Harry se desplazó hacia otro sitio haciendo la croqueta, parecido al gran cubo de antes, pero más alargado, y con una ventana semiesférica donde podían ocultarse. Alex le siguió haciendo lo mismo. Se metieron en el cubilete ese y miraron el panorama. Niños andaban cerca.

- ¡Cuidado! - volvió a decir ella, volviendo a empujar a Harry, pero esta vez ella también se apartó con él, y se refugiaron en la ventana semiesférica. Ella quedó acomodada en aquel espacio, y Harry por accidente -o no tan accidente- quedó en frente de ella. Pero también es que la ventana era muy pequeña, haciendo obligatorio que estuviesen tan cerca. Alex se percató en sus ojos, verdes brillantes, esmeralda. No sabía por qué pero ella siempre se fijaba en los ojos de los chicos, por antonomasia. Harry también se había percatado de la cercanía.Obviamente él había forzado un poco la situación. Él quería que siempre fuese así, que esa cercanía fuese presente cada día, que sea suya, de los dos. Desearía que aquel que estuvo en la playa con ella ayer, tan pegados, no fuese Louis, sino él.

- ¡Ey, aquí no podéis estar! - dijo una voz chillona a su lado. Era un niño, bajito, con pelo champiñón castaño.

- Pium, pium, pium - le dijo Harry apuntándole con la pistola hecha con sus manos. - ¡Te he matado, mensajero del mal!

- ¡Alice ven! - dijo el niño. A los segundos apareció una niña pelirroja con pecas y dos trenzas, con varios dientes caídos, y tras ella, un niño casi igual, más pequeño.

- ¿Qué pasa? - dijo la niña pequeña.

- ¡Me ha disparado! ¡Es un hombre malo! - la niña le miró  fulminándole, y junto al niño igual a ella más pequeño, se lanzó contra Harry, después se les unió el primer niño.

- ¡A por él! - gritó el pequeño. Alex les miraba ajena. Harry en el suelo, con tres niños sobre él, haciéndole cosquillas, o cosas de forma que le machacaban, aunque Harry simplemente se reía encogiendo las piernas.

- ¡Sí, a por él! - dijo Alex acoplándose a todo el barullo.

- Eres una traidora, - le dijo Harry.

- Lo siento, pero Voldermort, Craneo Rojo y el Joker me han convencido para unirme a su bando. - Harry apartó rápidamente a los niños y se tiró srobe Alex.

- ¡Ella es la mala! ¡Quiere dominar el mundo con espadas láser malignas!

- ¿También Star Wars? - Harry asintió mientras los niños se abalanzaban sobre ella y le hacían lo mismo que a Harry, mientras el susodicho se reía. - Venga, vale, me habéis ganado, he perdido - dijo Alex incorporándose un poco. Los niños chillaron felices y victoriosos. Ella se acercó a Harry - Uf, que horror. - Harry sonrió.

- Venga, vamos a bajar. - caminaron a gatas hasta la entrada del tobogán - ¿Primero tú o yo?

- Mmm... ¡Hacemos una cadena! - él la miró feliz. 

- Va. - Alex se posicionó primero, sentada en el borde. Con un solo movimiento, ella se caería por el tobogán, pero Harry la sujetaba. Él se puso detrás suyo, con las piernas abiertas, rodeando las de ella. - ¿Preparada? - ella asintió y Harry se impulsó, para caer hacia abajo. La caída apenas duró unos cinco segundos, pero a Alex le pareció mucho más. Estaba gozando como una niña pequeña, conmemorando recuerdos. Ambos bajaron del tobogán y se incorporaron. Lo gracioso de todo esto es que en ningún momento habían dejado las bolsas con las compras, que habían atravesado el castillo y luchado contra los niños con los paquetes como obstáculos. Salieron de ahí aún riéndose por los niños y su actuación - Espera - Harry se paró - Vamos a hacer una cosa - guió a la chica y se posicionó delante de un fotomatón. - Vamos a hacernos fotos.

- ¡Como en Princesa Por Sorpresa!

- Exacto. - Harry levantó la cortina que había y se metió, sentándose en el taburete que había. - No hay mucho espacio. - dijo.

- Ya veo...

- Siéntate en mis piernas - Alex le miró dudosa, pero acabó poniéndose encima de la pierna derecha de Harry. Programaron cómo querían las fotos. - 3... 2... 1... - dijo Harry dando la entrada. Cada vez que salía una foto adoptaban una posición nueva. Cuando terminaron, salieron, y esperaron unos segundos a que se imprimiesen las fotos.  Al fin ya estuvieron y las cogieron. Eran cinco fotos, en la primera salieron normales, sonriendo, en la segunda, habían puesto muecas con la boca, en la tercera, cara de pervertidos que era abriendo mucho las cavidades nasales y estirando mucho los labios; en la cuarta Harry había cogido un mechón de pelo de ella y se había fabricado un bigote mientras ella se reía echando la cabeza hacia atrás, y finalmente en la quinta Harry había aprovechado para darla un beso en la mejilla, haciendo que Alex se sonrojase ciertamente, a la vez que se mordía el labio.

- La cuarta el genial, eh.

- Si, pero la quinta es la mejor sin duda, la que más me gusta. - Alex miró a Harry, que miraba la foto feliz. Él giró la cabeza, ya que ella se había pasado un tiempo en silencio. Sus miradas conectaron y rápidamente Alex la apartó, porque había sido un momento raro, diferente. - Al final si que he visto la diversión - dijo él.

- Me alegro - le sonrió.

- Venga, vamos hacia casa. 


Guardaron las fotos y se sonrieron una última vez, antes de empezar a andar hacia la salida.
Y en un momento de valentía, Harry se arriesgó a juntar su mano con la de ella, entrelazando los dedos.
Alex miró confundida sus manos, y después miró a Harry, pero este no le devolvía la mirada, sino que estaba de frente, aunque con una sonrisa presente en sus labios.
Y lo que más le confundió a Alex no fue que la cogiese de la mano, sino que no la incomodaba que así fuera.


(...)


Victoria estaba en su cama. No se podía dormir. Daba vueltas y vueltas por la almohada. Ni siquiera su amigo Ed Sheeran lo había conseguido con sus canciones lentas y placenteras.
Muchas cosas pasaban por su cabeza. Una de ellas era la fiesta de Niall. Presentía que algo, algo importante iba a a ocurrir. Quizás con Liam... Quién sabe.
Liam.
Otra cosa que hacía que no durmiese.
Él había ido ese día a verla, a buscarla al colegio. Se supone que aquel chico era prudente, bueno, sin casi maldad en las venas. pero por ella se había saltado clases, había cogido el coche de su hermana y había conducido sin carnet. 
Todo eso por ella.
¿Desde cuando los chicos hacían tantas cosas por alguien? Hace mucho que ningún chico se portaba así con ella.
Él era... Diferente.
Especial.

Un sonido en la ventana le llamó la atención. Seguro que era una rama.
Volvió a repetirse el sonido. Quizás era una rama que se había movido dos veces.


- Deberías cerrar las ventanas para dormir - dijo alguien. Victoria pegó un brinco y se juntó al cabecero rápidamente, debido a un susto enorme.

- Liam, ¿qué haces aquí? -dijo susurrando.

- Necesitaba... Tenia que venir. - Victoria le miraba, sin poder ocultar la sonrisa que le había salido.

- ¿Por qué? - él se encogió de hombros.

- Llamé dos veces a tu ventana, ¿sabes?

- Creía que era una rama. 

- Comparándome con un árbol... Genial - ella sonrió acercándose un poco más, aunque sin bajarse de la cama. - No tengo mucho tiempo, apenas unos minutos.

- ¿Has venido solo durante cinco minutos? - él la miró y asintió. - Liam, ahora en serio, ¿por qué has venido?

- Necesitaba... - ella se acercó más a él, bajándose de la cama y poniéndose de pie, enfrente suyo. Liam la miró de arriba abajo. Llevaba una camiseta negra de los Ramones y un pantalón corto de cuadros de colores. Estaba preciosa con algo tan simple.

- ¿Qué necesitas? - Liam la miró fijamente a los ojos y avanzó un paso hacia ella.

- Necesito esto.


Liam le pasó un mano por la cintura y tiró de ella, acercando sus caras y pegando sus bocas, haciendo presente ese beso tan esperado, que había enloquecido a Liam, que no le había dejado dormir, la razón de que él hubiese ido a la casa de ella.
Sus labios compenetraban a la perfección y sus lenguas se movían al compás. Ella pasó los brazos por el cuello de él, mientras Liam la juntaba más a su cuerpo. Todo esto era como un dejavu, como si ya lo hubiese vivido, y es que era la verdad, ya lo había vivido.

Victoria a su vez estaba en un sueño. ¡La estaba besando! Y ella no se lo esperaba. ¿Cómo se puede esperar una que a las dos de la noche llegue un chico para besarte?
Además es que lo hacía tan bien... Justo ese momento se podía calificar como perfecto, y ambos, en su cabeza, estaban de acuerdo.

Sus ritmos cardíacos empezaron a relajarse, los besos eran mas lentos y más pausados, con ciertos segundos de parada para tomar aire, hasta que al fin se separaron, apoyando cada uno la frente en el otro, los dos con una gran sonrisa.


- Te veo mañana - dijo Liam - te recogeré a las ocho. 

-Pero... - ella quería decirle que se quedase con ella esa noche, que así dormiría al fin, y lo raro es que su única intención era dormir, no mancillárselo ni nada. Pero no, era muy arriesgado, sus padres estaban a metros.

- Hasta mañana - Liam le dio un corto beso en los labios y se fue hasta la ventana. La sonrió por última vez y se marchó, con el propósito que tenía cuando llegó cumplido.



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HOLAAA! HOY HE SUBIDO MÁS PRONTO EEEH,
Por ask dije que subiría antes de las tres pero bueno...
Bueno, este capitulo me encanta.
Es genial, no me digais que no ajajjajajajaja
Ala ya habeís tenido momento Halex, ya no quiero quejas eeeh
Por cierto, que estos dos días haya subido seguido no significa que  siempre vaya a ser así, puesto que no me da la vida. Hoy era una excepcion porque ayer no escribí todo lo que me hubiese gustado
Y bueno, nada más. Que comentéis si quereis.
Un besotee:)

13 comentarios:

  1. Holaa lidiiuus te echó del menos y lo del baile de la pasa es totalmente un homenajeado a tys amigas eeeeehh jaajaj me ha encantado estoy enamorada de liam y victoria
    un beeso desde Boston
    gaaaabii <3

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    1. GABIIIIIII TE QUIEROUUU:) VUELVE YA GUARRAA!!
      *QUÉ PASA?*
      *EL BAAAAAAILEEE DE LA PAAASAAAAAA*
      Jjajajajaja un besoooo:)

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  2. Joder Lidia. Momento Lictoria *-* oh dios. Me a encantado eh. Y el momento Halex ahí con todos los niños ha sido gracioso :')
    Siguiente :)

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    1. Jajajajjajaj Lo de los niños es muy gracioso ajajajaj
      Un besoo:)

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  3. OMG *-*
    Perfección de capítulo con Harry y Alex. Y con Liam y Victoria, madre mia he muerto completamente con Liam.
    Siguienteee :)

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    1. Jjajajaja me alegro de que te haya gustadoo
      Yo también caigo muerta con Liam, ojala sucediese en la realidad ajajja
      Un besoo:)

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  4. Me a encantado.
    Halex, halex, hale, halex, halex, halex... me encanto *-* Y lo de la peli porno ha sido muy gracioso jajaja
    Luego Lictoria mmmm como se puede explicar la perfeccion??
    Y realmrnte con este capitulo me as dejado sin palabras
    Y por ultimo decir qe me as dejado con la intriga de saber lo qe pasa en la fiesta porqe en lo unico qe acerte fue qe iba Cecilia
    Besiiis

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    1. jAJJAJAJAJAAJJ Es que estaba escribiendo y tenía que poner una excusa para que no pudiesen ver la peli y fuesen al centro comercial, asi que dije: pues toma peli guarra ajajajaj
      Lictoria son mazo monos, me enamoro hasta yo jajajaja
      Mmmmm ya vereis
      Un beso:)

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  5. ASDJENBSDMJNBFDXMEJVCD DIOOOS QUE MONOS LIAM Y VICTORIA POR FIN :D
    Y Alex y Harry aqui hay rollito jajaja
    Me ha encantado el capitulo, sobre todo la parte Halex
    Beeeeeeesos:)

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    1. Jjajajajaja siii son mazo cuquiiiiiis ajajajajja
      rollete del bueneteee
      Jjajajaj graciaaaas
      Un besooo:)

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  6. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  7. Lidia cariño mio como escribes.. Yo que me creia buena escritlra..
    Siguela pero yaaa eh, es como una pequeña droga xD
    Tenemos que tener mas petaciones de Twitter eh? Un besito guuapa

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    1. Jjajajajajjaj graciaaas
      Tranquila que yo la sigooo
      Va, un día lo volvemos a petar ajjajaja
      Un besooo:)

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