martes, 17 de septiembre de 2013

29. Your hand fits in mine like it's made just for me.

Decir que Alex pasó mala noche era quedarse corto. Llegó a casa, con Harry en los talones, y rápidamente subió a su cuarto. Hizo unos pocos deberes que le habían mandado… Tres semanas de clase y los deberes seguían siendo escasos. Joder… Tres semanas solo… Alex se sorprendía. Había pasado poco tiempo desde que empezó el colegio, pero ya habían ocurrido muchas cosas.  ¡Era tanto que asimilar! Después de hacer los ejercicios y algún resumen que otro, aceptó un chocolate caliente de Robin, vio parte de una película con Sophie y cenó. Después de todo eso, subió a su cuarto encerrándose en él, quedándose sentada en la cama pensando.

¿Qué narices había pasado en aquel banco?

Recordaba mirar a Harry fijamente, mientras el tiempo pasaba. Quizás solo fueron dos segundos, pero en esos dos segundos que se hicieron eternos, pasó por delante la historia de su vida, acabando en Harry.

Y es que si él fuera más… menos… con un poco de… Que era bipolar, leñe.

Un día te odio, al siguiente tengo unos celos de Louis que te cagas, y así en adelante.

Pero es verdad que estos últimos días las cosas parecían distintas, como que Harry se involucraba más, y estaba muy atento con ella. Aunque cuando vio lo del martes con Bianca… La verdad es que esos dos pegaban, y la pareja que podrían hacer si fuesen novios era preciosa, pero Alex admitía que si llegaban a salir Harry y Bianca, le incomodaría un poco, pero solo en el fondo, muy muy en el fondo.

En realidad Alex no tendría de qué quejarse. Su novio es encantador, guapísimo y que la vuelve loca, solo que a veces… Parecen más amigos que otra cosa. Cuando le mira es como antes de ser novios, siente que es un chico en el que puede confiar y con el que quiere pasar tiempo. Pero a veces cuando mira a Harry…

Qué cojones, cuando mira a Harry lo que quieres es estamparle contra la pared y hacerle cosas que ni Christian Grey pensaría hacer.

Y con esos pensamientos, los de “quiero a Louis pero Harry me atrae mucho” se enterró en las sábanas rogando a Morfeo que ejerza su poder del sueño sobre ella.





Harry se había percatado de que Alex estaba rara desde ayer por la tarde. Conociendo cómo era, no le preguntó anda al llegar a casa, para darle su aire, así que la dejó tranquila.

El jueves por la mañana, la esperó para salir de casa y después empezó a andar con ella hacia el instituto.  En lo que llevaban de camino no abrió la boca. Esto no fue lo que principalmente le resultó extraño a Harry, sino que fue el hecho de que llevaba más de doce horas sin insultarle o hablarle de mala forma. Quizás era un avance, quién sabe.



- Oye,  ¿te pasa algo? – preguntó al cabo de unos segundos. Ella parecía que iba en su mundo, pues no miró al instante a Harry, sino que lo hizo tras un instante.

- ¿Qué?  - definitivamente si que iba en su mundo.

- Que si te pasa algo. Estás… No sé, distante.

- Ah… No, estoy bien. – dijo sin mucha convicción fingiendo una sonrisa.

- Y… ¿Qué tal con Louis? – Harry no quería sacar ese tema, pero de algo tendrían que hablar, que sino todo era muy soso.

- Bien…

- Vale…  - qué expresiva, vaya. - ¿Y con las chicas?

-  Bien…

-  Apostaría todo a que tu palabra favorita es “bien” – intentó sacar una sonrisa a Alex, y lo consiguió, pero fue por solo un instante.



Harry no volvió a hablar después de ese momento, y obviamente Alex tampoco.

Si la chica estaba mustia como una lechuga pasada pues estaba mustia como una lechuga pasada, ¿qué se le iba a hacer? Además, por pura experiencia Harry sabía que cuando una chica estaba plof lo mejor no era dar la vara todo el rato, porque acabarías liberando al demonio que aguarda dentro.

Cuando llegaron al instituto, Zayn estaba en la puerta fumando un cigarrillo junto a Bianca. Esta, al verles, fue hacia ellos y saludó a ambos con un efusivo abrazo, haciendo que Alex se animase una milésima más.



-  ¿Pero qué ven mis ojos? ¿Harry y Alex a menos de tres metros y sin insultarse? – bromeó Zayn.

- Intentamos batir un record – le siguió Harry. El moreno se acabó el cigarro y entraron los cuatro juntos en el edificio lleno de alumnos, hasta que alcanzaron la parte en la que tenían que separarse. Harry se despidió de los demás, dando al final un beso en la mejilla a Bianca, y esta le pellizco el brazo cariñosamente. Después, los tres restantes hicieron amago de entrar en clase, pero antes de eso, Zayn agarró de un brazo a Alex.

- A ver señorita – dijo – cuénteme usted que le pasa. – Alex alzó la mirada hacia él.

-  Nada, cosas de chicas, ya sabes… - Zayn frunció el ceño.

- Tengo tres hermanas, ¿de verdad crees que me trago eso? – sonrió sinceramente, y Alex suspiró.

- ¿Qué harías si sales con alguien y te atrae mucho otra persona

- Bueno, siendo yo dejaría a mi pareja, bueno depende de cuánto tiempo llevemos, y me lanzaría a por la que me atrae.

- Pero…

- Pero si fuese tú, – la cortó – y creo saber quién es la persona que te atrae, pues esperaría unos días para saber si esa otra persona es un simple capricho o es algo más. Y si merece la pena pues a por Harry. – Aex abrió la boca como medio indignada sorprendida.

- ¿Tanto se nota? – preguntó mordiéndose el labio, a la vez que oían cómo sonaba el timbre.

- Depende. Louis no nota nada, pero todos los demás sabemos que Harry y tú os traéis un rollo raro. Nos fijamos en cómo le miras.

- Pero si le miro normal… - Zayn alzó las cejas bajando un poco la cabeza, y Alex acabó sonriendo. – Vale bueno… No tan normal… - el chico acompañó su sonrisa.

- Pues lo dicho… Pero procura que en el caso de que esa otra personita no sea un capricho, que Louis no se entere de la peor forma, ¿vale? – Alex asintió.

- Señor Malik – dijo el profesor de Filosofía, que rondaba por ahí. – sé que la señorita Drake es una chica muy interesante, pero no creo que este sea el momento para pasar el rato intentando conquistarla. Es más, deberían estar en clase ya. – Zayn sonrió ladinamente y juntó a Alex hacia él, cogiéndola de la cintura.

- ¿Pero es que no has visto lo guapa que es mi churri? – vaciló – Imposible no resistirse.

- A. Clase. Ya. – remarcó el viejo señor arrugando la frente. Los dos alumnos se dieron la vuelta, intentando no reírse. De repente Zayn movió la mano hacia el culo de Alex, sabiendo que el profesor les seguía mirando.

- Lo siento por esto – susurró el moreno a ella – Era para meternos más en el papel. – Alex rió, quizás la primera carcajada real del día.

- Pero no te acostumbres mucho eh…



Entraron en la clase y fueron a sus sitios. Bianca y Liam estaban hablando sobre algo concentrados, mientras Niall les escuchaba atento.



- ¡Alex! – llamó Liam en cuanto vio a la chica – ¿Qué preferirías? ¿Ser sorda y muda o no tener ningún brazo? – ella miró hacia Bianca y hacia él, varias veces, que la miraban a ella como con impaciencia.

- No me digáis que estabais hablando de eso…

- ¿A qué preferirías los de los brazos? – apoyó Bianca.

- No elegiría ninguna – dijo sentándose. 

- Buenos días Alex, bien que me saludas eh – Niall habló. A chica se acercó a él y le dio un beso en la mejilla.

- Buenos días Niall, ¿qué tal? - este chasqueó la lengua.

- Pues mira, ayer Cecilia se uso como una energúmena conmigo por algo que no sé que es, ayer me tragué dos pelis de chicas y después mi hermano se estuvo descojonando todo el rato de mí llamándome nenaza. Por lo que de puta madre. - Alex rió.

- Eres único, ¿lo sabes?

- Mira quien ha entrado. - susurró Bianca por lo bajo. Niall se giró y vio a Cecilia entrar, pasando una dura y breve mirada por el rubio, que acabó apartando. Se sentó en su sitio y miró a sus amigas.

- Hola chicas. - saludó.

- Hola Cecilia - dijo Niall.

- Mmm... - entrecerró los ojos sin mirarle - ¿No habéis notado como una brisa aquí a mi derecha? - el chico se sintió levemente insultado.

- ¿Asi que me vas a ignorar? Pues vale, yo voy a hacer lo mismo. Oye Liam, ¿por qué no te sientas aquí en este sitio sin ocupar? - se dirigió a su amigo señalando el asiento de Cecilia.

- Sois como niños, los dos, de verdad - contestó Liam negando con la cabeza.

- Y por esa razón estáis hechos el uno para el otro. - dijo Bianca con una sonrisa, haciendo que los dos rubios se sonrojaran y se giraran rápidamente, callándose mientras la profesora de la materia que tocaba entraba corriendo en la clase, pues llegaba tarde.




(...)



El recreo llegó y las chicas se pusieron en pie, con los chicos detrás. Harry y Louis estaban en la puerta esperando a todos. Alex saludó a su novio, aunque le dio un beso en la mejilla, con menos ganas que cualquier otro día, y era normal, teniendo en cuenta cómo tenía la cabeza.
Empezaron a andar hacia el exterior, pero Harry agarró de un brazo a Cecilia.


- Ey enana.

- Ey grande. - Harry sonrió.

- ¿Podemos hablar un... rato? - Niall, que había caminado más lento para ir escuchando, se dio la vuelta. Ese tipo de cosas eran las que le confirmaban que entre Harry y Cecilia.

- Claro - él abrió muchos los ojos y tensó la mandíbula ante la contestación de Cecilia. Harry y ella se apoyaron en las taquillas cercanas.

- Cuéntame sobre el tema de Niall. - el rubio se acercó un paso más para oír, pero en ese momento Louis tiró de él, ya que había visto que se había retrasado, por lo que tuvo que darse la vuelta sin escuchar esa conversación que tanto le interesaba. Mientras, Cecilia se apoyó en el metal de la taquilla y suspiró.

- Pues que es imbécil... Uf... Es que te cuento como a las chicas, que estoy harta de él. ¿Tu ves normal que yo tenga que aguantar esos impulsos suyos de hoy me pones, mañana no? Y hoy va y se enfada porque le ignoro...

- ¿Le has ignorado? - Harry rió - Pobre Niall, vive de vuestra amistad, o de lo que tengáis.

- Pues que viva de otra cosa, pero que a mi no me toque el chumi, que se aclare.

- Ya, en eso tienes razón.

- ¿Sabes que cree que tú y yo tenemos algo? - Harry alzó una ceja.

- No jodas... - Y Cecilia se lo afirmó asintiendo.

- Y según Alex está celoso.

- Pues entre Bianca y tú con lo de los celos... - Cecilia abrió mucho los ojos.

- ¿Qué?

- Em... Nada.  - Harry se había dado cuenta de su error.

- ¿A quién quiere poner celoso Bianca? 

- A nadie, a nadie... - el chico miraba a todos los lados, nervioso.

- Venga Harry...

- Es que no puedo decírtelo porque si se entera su no... - Él se tapó la boca, volviendo a darse cuenta del segundo error que había cometido.

- ¿¡Louis!?

- No digas nada, por favor, que s eme ha escapado - rogó Harry.

- Tranquilo... - Cecilia pensó - ¿Pero con Louis? Hostia puta, qué callado se lo tenía...

- Ya... Naide se lo esperaba...

- Es que... ¿Louis? - Cecilia se seguía sorprendiendo. Esperaba que le gustase Harry o Liam, o incluso Zayn, ¿pero Louis? Increíble.



Siguieron hablando varios minutos más sobre ciertas cosas. Se volvió a mencionar por encima a Niall, Ceilia seguía quedándose asombrada por lo de Louis, comentaron cosas sobre algunas clases, sobre la futura boda del sábado, etc.
Cuando sonó el timbre del recreo, vieron que sus amigos se acercaban hacia ellos andando. Cecilia se unió a Zayn para entrar por clase, parando por delante de Niall, al cual ignoró, pero este hizo lo mismo. Ni la miró cuando pasó, aunque ganas tenía, y se metió rápidamente en clase.




(...)




Victoria y Liam estaban tumbados en la cama, uno enfrente del otro. Ambos ya habían acabado las clases, teniendo un día normal y corriente en sus vidas, y se fueron a casa. Después, como hizo el lunes y el miércoles, fue a casa de Victoria y ahí tuvieron su ración de sexo diaria. Nada fuera de lo común. Solo aparearse y muchos besos. 


- Asi que a Emily no la cogieron de animadora, ¿eh? - dijo ella con cierta satisfacción.

- No, y todo porque lo provocaste tú.

- ¿Pero a que fue divertido? - él no pudo ocultar una sonrisa. En ese momento el móvil de Victoria sonó, pues le había llegado un mensaje de su madre.



"Urgencia! Se me ha adelantado el periodo. Necesito que vayas a comprar compresas y tampones, ya sabes cuales me gustan. Me pasaré por casa en 30 min. Bss, mamá."


- ¿Qué? - se incorporó rápidamente tapándose con la sábana y volvió a leer el mensaje.

- ¿Qué pasa? - preguntó Liam acariciando con una mano la espalda de ella. Victoria suspiró cerrando los ojos, en parte porque le sulfuraba el tener que salir de casa, pero en otra mayor parte porque le encantaba sentir el calor que transmitía la mano de Liam sobre su cuerpo. Soltó el aire y miró al chico.

- ¿Me acompañas a comprar tampones?


Se vistieron deprisa, pero con cierta tranquilidad. Liam se reía de vez en cuando porque le hacía mucha gracia lo de tener que ir a comprar tampones y demás. Nunca había ido, ni para sus hermanas ni para su madre ni para nadie, por lo que era su primera vez.
Salieron de casa juntos y empezaron a caminar hacia un supermercado pequeño que había cerca. 
Entraron en este establecimiento y se fueron a la zona de cosméticos, champús, geles, cosas así. Y entre ellas, los tampones. 
Victoria se quedó parada un minuto delante de las estanterías, buscando los que quería su madre. Liam observaba todo eso maravillado. Bueno, maravillado no porque la menstruación nos e encuentra en la lista de las cosas que más le apasionan, pero si que le entretenía mirar la cantidad de marcas que había sobre cosas de la regla. Se hubiese puesto a contarlas, pero algo le llamó la atención. Se acercó al producto y lo cogió, yendo hacia la chica.


- Victoria, no te olvides del Vaginesil, que sino te chirría el asunto. - ella se giró hacia él, para ver cómo se reía en su cara.

-Vale, - respondió mientras cogía las cajas de tampones y compresas requeridas - y tampoco me olvidaré de coger los preservativos tamaño XXS para ti. - sonrió con orgullo.

- Oye, con mi pene ni una. - se defendió él.

- Jóvenes de hoy en día... Solo les importa acostarse y nada más... - habló una señora mayor con bastón y pelo cobre que pasaba por ahí, la cual les había oído. Liam y Victoria se miraron callados durante unos segundos, pero después empezaron a descojonarse. Si ella supiera toda la historia...

- Venga, vamos a pagar. - dijo Victoria cuando sus risas cesaron. Liam asintió cogiéndole de la mano a victoria y fueron hasta la caja. Allí pagaron y salieron de aquel sitio. Suerte que no volvieron a encontrarse con la señora aquella...


Caminaron de vuelta a casa con las manos aún juntas. Solo Liam se había percatado de aquel gesto cariñoso, pero Victoria lo acogió como si fuese algo corriente. Llegaron y visualizaron el coche de Martha aparcado enfrente de la puerta del garaje. Sabiendo que habría alguien en casa, llamaron al timbre.
En realidad a Victoria no le gustaba que su madre viera que estaba con Liam, porque la conocería y o sería una pesada con él, o se comportaría como una borde.
Cuando se abrió la puerta, la madre de Victoria esbozó una sonrisa gigantesca.


- ¡Liam! - saludó animadamente, pero segundos después se sonrojó - Lo siento porque te enterases de lo de... mi periodo. - dijo esto último susurrando.

- No pasa nada, vivo con tres mujeres mas en mi casa. - Martha sonrió.

- Toma mamá, tus cosas - la hija le entregó la bolsa con la compra mientras entraba en la casa.

- Gracias cielo. Oye Liam, ¿entras? - preguntó.

- Oh no, yo debería irme yendo. - se excusó. Se acercó a Victoria y le dio un corto y puro beso, de apenas un instante. - Te veo mañana. - ella asintió, sin decir nada más pues nunca hablaba mucho delante de sus padres, pero al menos sonrió, sinceramente. - Supongo que a ti te veré el sábado, en la boda, ¿no?

- Sí, es verdad,  - afirmó la madre - tus padres no asisten, ¿no? - él negó - Que pena... Me hubiese gustado conocerles.  - Victoria giró la cabeza con tal rapidez que cualquiera afirmaría que se había lesionado el cuello. Pero es que lo que había dicho Martha... ¿¡Conocer a sus padres!? ¿Pero esto que es? Aun así, Liam estaba tan normal.

- Claro, ya llegará el dia. - sonrió - Bueno, me voy ya que os estoy entreteniendo.

- Adios Liam - se despidió la señora agitando la mano. Su hija en cambio no dijo nada, aún tenía que asimilar lo que había dicho hace unos segundos.


Su madre cerró la puerta y miró durante dos segundos seguidos a su hija, finalmente abrió al boca para hablar.


- Me gusta este chico como futuro padre de mis nietos. - a Vitoria se le desencajó la mandíbula. Bueno, bueno, bueno... Esto ya es pasarse. ¿Qué falta, que les organice su boda?


Esto estaba yendo muy lejos, y Victoria se empezaba a dar cuenta. Subió las escaleras con rapidez y se encerró en su cuarto.
Conocer a los padres de Liam... No, no y no. Definitivamente no. Sería muy raro, además que esas cosas son cosas de novios, no de folliamigos. 
Aunque no puedo evitar preguntar en su cabeza que, si les llegara a conocer, ¿la aceptarían? En plan que si les caería bien o algo a´si.
Y si no era suficiente todo esa vergüenza, va y dice lo de los nietos.
A ver, ¿hijos entre Liam y Victoria? ¡Pero si aún les falta aclarar otras cosas más simples!
Y con ese pensamiento, inconscientemente,se le pasó por la mente que en un hipotético caso de que tuviesen hijos, serían los hijos más bontios del mundo.
Con los ojos de Victoria... La nariz y el tono de piel de Liam... El caracter de ella... La paciencia de él en ciertos momentos...

Sí, esto ya sobre pasa el límite.
Victoria cortó el río sentimental de pensamientos que recorría todo su cuerpo, y se tiró en la cama.
Se le salía de las manos todo ese asunto, y había que tomar ciertas medidas para seguir controlando los estribos.
y con todo el dolor del mundo, más un sentimiento de arrepentimiento prematuro en su cuerpo, decidió cortar de raíz.

Cogió el móvil, abrió el WhatsApp e inició conversación con Liam, escribiendo un mensaje simple pero directo.



"No podemos seguir acostándonos. No espero que lo entiendas, y no preguntes. "



(...)



Alex se levantó de la cama de nuevo, sin poder dormir. Ya era la segunda noche, y seguidas.
Pero había demasiado que comentar como para malgastar el tiempo en sueños y pesadillas. 
Con el paso del día se fue animando más, peor aún seguía sin ganas de nada. Todos le preguntaron que qué le pasaba, incluso Louis pero contestó a todos como que estaba teniendo un día regloso.

Le daba pena Louis. Él siempre se comportaba bien con ella. Y ella....pues no.
Aver, le trataba bien, pero no tanto como se merecía.

Bajó descalza las escaleras, sintiendo escalofrío en la planta de sus pies por el suelo frío y se sentó en el último escalón.
Estaba metida en sus desordenados pensamientos cuando una voz le interrumpió.


- ¿Tú tampoco puedes dormirte?


----------------------------


Holaa, a ver, not engo tiempo
Losiento por subir hoy, se que me rogasteis que subiera el lunes, pero tnto sábado como domingo como lunes e incluso parte de hoy he estado muy ocupada. 
Además me encuentro fatal, será de la regla o yo que sé, pero me caería en un segundo.
Para acabar simplemente quiero agradecer a los que vieron mi twitcam, aunque después se llenase de acosadores (sí, gente que me decía cosas raras y tal)
Bueno, da igual
Muchos besooos:)
PD: muchaaaas felicidades de lauraaa gonzaleeeez:) tequieeee:)


8 comentarios:

  1. El momento Mharta -Liam-Victoria fue el mejor sin duda. Haber quien aguanta ahora a Liam con el cabreó que se va a coger...
    Un besito cielo :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jjajajajaja es que la regla me inspira mucho ajajajajja
      Un besoo:)

      Eliminar
  2. lidia me encanta tu novela!! me puedes avisar por twitter cuando subas capitulo?? soy @paulaa_dc, gracias, un besoo

    ResponderEliminar
  3. Me gustó mucho tu anterior novela , pero esta aú más asique no dejes de escribir por favor que lo haces genial. Tengo ganas del siguiente capítulo y te pediría que publicaras más a menudo pero sé que eso es pasarse y que tienes unaa vida ajajajaja. Enhorabuena por la novelsa de verdad !!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Graciaaaas, y tranquila que no dejaré de escribiir!
      A mí también me gustaría subir más a menudo, créeme:)
      Gracias de nuevoo! un besoo:)

      Eliminar
  4. Me encanta tu novela en serio. Es la mejor que he leído hasta ahora. Cada día cojo el movil entro en favoritos y miro a ver si tienes el siguiente. Pero tranquila que no te estoy metiendo prisa. Todo necesita su tiempo y más para estar así de currado. No tengo mucho más que decir. Ah! Si. Que me encantan Harry y Alex. Ojalá acaben juntos aunque todo tiene sus baches ya los superará. Porque si fuera tan fácil como yo te quiero y yo también la novela sería aburridísima. Bueno, que me estoy yendo por las ramas. Que te felicito por escribir tan bien y que siento no poder haberte puesto más comentarios pero es que con unos rollos familiares y el instituto no doy para más.
    (No he podido entrar desde mi cuenta de google)
    Besos, Avriil

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Joetas, muchas gracias:):)
      Jjajajaja aa todo el mundo le gusta Halex, a tooodos. pobre Louis, que me lo desterrais ajajajajaj
      a mi es que me gusta lo de ponerle dramilla ajjajajaj
      No apsa andaaa
      Gracias por leeeer
      un besooo:)
      (me encanta tu nombre, es como el de avril lavigne*.*)

      Eliminar