viernes, 7 de junio de 2013

4. And I saw your face, fell in love.

Pasaron dos días desde aquel en el que se dio el épico episodio en la ducha.
Dos días fueron suficientes para que Alex se acostumbrara al entorno de su nueva vida, para que se le metiera en la cabeza que así iban a ser las cosas los próximos años.
La verdad es que no le pintaba mal su nuevo plan de vida, pues veía a su tía feliz, que era lo que más le importaba, y con Robin y Sophie todo de miedo. Aunque con Harry ya la cosa cambiaba... Estos dos días habían estado sin hablarse, lanzándose algunas putadas pero bueno, era gilipollas y lo tenía asumido.
Alex no se chocó con ningún amigo más de Harry, aunque tampoco es que saliese mucho de casa... Solo algún paseo por ahí y punto.

Bueno, que para concluir, Alex se encontraba con su prima, Victoria, en su habitación, escuchando música y recordando buenos momentos de la infancia.

- ¿Cuando empiezas el nuevo colegio? - preguntó Victoria mientras, recostada en la cama, se divertía alzando y bajando los pies.

- Pues creo que el martes, en cuatro días.

- Cabrones... - se quejó la otra - Yo el lunes. ¡Oh, sube el volumen que me gusta esta canción! - comenzó a canturrear la melodía en cuanto empezó a sonar Can't Hold Us de Macklemore.

- Uf, no quiero empezar.

- ¿El qué?

- El colegio so mema.

- ¿Por?

- La tal Cecilia que me tiene asco, clases, exámenes... Además me han dicho que hay un tal Zayn que siempre va a por las nuevas, a pillar.

- ¡Me lo pido! - dijo Victoria con júbilo.

- Pero qué cerda eres...

- Hombre, si el chico no está mal... Te exijo que te hagas amiga de él y me lo presentes.

- Si si si. Oye, ¿y tu instituto? Nunca me cuentas nada.

- Uf, mejor no hacerlo. Lleno de gente que no merece la pena, lo que daría por cambiarme de colegio, en serio. Todas son unas falsas...

- Cámbiate al mío, y así vamos juntas.

- Imposible, no creo que me dejen. Además, ¿no se supone que el colegio ya tiene las plazas cogidas?

- Pues no sé, pero tú pregunta, que yo no aguanto teniendo solo a Harry de conocidos en el sitio ese...

- Bueno, ¿y el tal Louis con el que te chocaste?

- Pues es verdad, también está él...




Justo en ese momento llegaba a casa Harry con sus tres mejores amigos, Louis, Liam y Niall.
Aprovechó que su padre, Grace y la pequeña habían salido para traerlos, lo malo es que estaba Alex y no le hacía nada de gracia que la impresentable aquella rondase por la casa con sus amigos delante.
Y mucho menos sabiendo la relevancia que tuvo en Niall y Louis cuando la conocieron. Vamos, es que ya ni de coña. Lo que faltaba... Que a parte de Louis, que Niall también estuviese enchochado con ella... Menos mal que Liam era el más responsable y que, a pesar de no haberla conocido, mantuviese un poco más la cabeza.
Y es que a ver, ¡la chica no es para tanto!
Solo mona y pelo bonito, y bueno, figura también bonita, que eso lo comprobó Harry cuando la metió en su ducha... Fue muy raro estar desnudo con ella ahí al lado, a lo mejor en algún momento miró la muy guarra... Y lo del sujetador, eso ya si que fue es colmo, que por cierto aun no se lo había devuelto, bueno, ni lo iba a hacer, ala, por lista, se había quedado sin un sujetador.
Bueno, y eso, que no era muy guapa. Era mil veces más guapa Bianca Sanders, de su curso. Que pena que fuese tan tímida y cerrada... Y que pena también que andase siempre con Zayn... Eso no le gustaba a Harry un pelo. Conociéndole, seguro que más de una vez la había utilizado por puro placer (sí, seeeeeeccccssooo). Si pasase de Zayn y se acercase más a Harry... Seguramente él la daría una oportunidad y la conquistaría... Quién sabe, a lo mejor eso ocurriría en un futuro...

- Oye, ¿podemos ver a Alex? - dijo Louis tirándose al sofá.

- No - contestó Harry.

- Yo no la he visto, me haría ilusión conocerla - dijo Liam. Harry le miró con el ceño fruncido. 

- A todo esto, ¿y Niall?

- En la cocina. - Harry puso los ojos en blanco. Cómo no... Con lo que comía el rubio, iba a dejarle la casa sin comida.

- No sé por qué no quieres que nos acerquemos a tu hermana. - dijo Louis.

- No es mi hermana.

- Bueno, hermanastra. Pero no la vamos a hacer ningún daño. Además, necesita a alguien que la integre.

- Pues que lo haga su prima, que se le da muy bien.

- ¿Su prima? - preguntó Liam.

- Sí, una tal Victoria. ¿No os he hablado de ella? - dijo Harry. Los chicos negaron - Pues uf, esa sí que está buena.

- ¿Quién está buena? - gritó Niall desde la cocina.

- ¡Tú come y calla! - le contestó Harry.

- Yo quiero conocer a su prima - dijo Louis.

- A ver - habló Liam - O Alex o Victoria.

- Ninguna de las dos - dijo Harry - Te presto a Cecilia, si quieres - Louis puso cara de terror y Harry y Liam rieron.

- La vi en Nando's el jueves - dijo Niall apareciendo con una bolsa de patatas sentándose en el sofá.

- Ya, estaba ahí. Más pesada... Se me acercó.

- A mi me habló con su bordería habitual - dijo el rubio.

- Me atrevería a decir que esa chica necesita un polvo que le alegre la cara y la actitud - expresó Louis - Pero como ya se la han cepillado de todas las formas posibles... Pues no tendría sentido - todos se rieron menos Liam.

- Pobrecita - dijo este último - Solo necesita alguien que esté con ella por verdadera amistad, no por interés como lo hacen Tania y Emily...

- Pues te recuerdo que tú a Emmily te la tiraste - dijo Harry.

- Bueno, pero ese no es el caso - se defendió Liam - el caso es que...

- A ver, Cecilia es así porque es una arpía sin motivaciones en la vida - dijo Niall seguro - Dudo que haya alguien que algún día la haga cambiar de parecer...

- Quién sabe - dijo Harry - Oye, voy a subir un momento a arriba - miró a los tres fijamente - No. Os. Mováis. De. Aquí. Que os conozco.

Y dicho esto desapareció subiendo por las escaleras.



Mientras tanto, Alex y Victoria seguían en el cuarto, sin enterarse de que los otros habían llegado a la casa por el ruido de la música.

- Uf, que hambre - dijo Victoria.

- La verdad es que sí. Voy a bajar a por algo.

- Vale. Y tráeme un vaso de agua por favor. - Alex asintió y salió del cuarto.


Harry subía las escaleras, ya memorizando lo que le iba a decir a Alex. Empezó a andar por el pasillo y justo ella salía de la habitación.

- Hola memo - saludó ella como cada día, andando sin pararse a su lado. Pero Harry la agarró de un brazo y la paró.

- Tenemos que hablar, mema - dijo recalcando la última palabra.

- ¿De qué, si se puede saber? - Harry miró hacia los lados y después tiró de Alex, metiéndose con ella en el cuarto de sus padres. Cerró la puerta y después se giró, quedando cara a cara con ella. - Vaya, cuando misterio. No me irás a decir ahora que en realidad eres una chica pero que te cambiaste de sexo hace años, ¿verdad? - el chico frunció el ceño.

- No. - tomó aire. Le ponía nervioso estar al lado de ella, pero nervioso en plan mal - A ver, mis amigos están abajo.

- ¿Amigos?

- Sí, Louis, Niall y Liam.

- ¿¡Louis!?Voy a saludarle - habló decidida.

- No.

- ¿Por qué? Oye, a todo esto, yo no conozco al tal Liam.

- Ni lo conocerás.

- Ah, muy bien, muy majo Harry. ¿Y por qué no puedo bajar a saludarles?

- Porque no, porque no quiero que estés por ahí molestando como haces siempre. Así que si puede ser, ¿te podrías quedar en tu cuarto encerrada?

- ¡Pero bueno! ¡Qué humores! Pero tranquilo que no os vamos a molestar.

- ¿Vamos?

- Sí, Victoria está aquí - su cara cambió y esbozó una sonrisa.

- ¿Está Victoria? Pues la saludo. - Alex le cogió del brazo molesta.

- Ni de coña. Yo no saludo a tus amigos, tu no saludas a mi prima - uf cómo le cabreaba este chico. Harry le giró para verla y esbozó una sonrisa ladina, acercándose a ella más y más. Alex retrocedía pero llegó un momento en el que la pared no la dejó avanzar más.

- ¿Qué pasa Alex? - sonrió más pícaramente - ¿Estás celosa de que me interese en Vicky? - Alex frunció el ceño mientras el otro se iba acercando más y más.

- Victoria. Tú no la puedes llamar Vicky - le puso una mano en el pecho para empujarle un poco y alejarle, pero no lo consiguió. - Y celos tendría si tú me importases algo, pero como no es así, pues lo siento. Más que celos es asco lo que siento. Asco hacia ti.

- Vaya, que nos saca las garras la fiera. Tranquila bestia - dijo Harry aproximándose cada vez más. A Alex se le estaba empezando a alterar la vena. ¿Pero qué se creía este?

- Oye, ¿te alejas o te alejo de un sopapo? - el chico soltó una carcajada. Decidió cabrear más a la chica.

- Ay Alessandra...

- Alex.

- Alessandra - ignoró Harry, princesa mía - a la chica se le estaba hinchando más y más la vena - yo sé que no te puedes resistir a mis encantos, y que adoptas esa actitud repelente de niña engreída e insoportable - Alex levantó una ceja - solamente para llamar la atención. Mi atención. Pero - Alex abrió la boca para hablar, pero Harry rápidamente le puso un dedo en los labios a modo de silencio. Alex flipaba - shhh, - susurró acercándose al oído de Alex. Ella ni se podía mover. ¿Qué conchas estaba pasando? - Pero tranquila - le dijo levemente en la oreja - quién sabe si quizá tú y yo, dentro de un tiempo, tenemos algo, ya sabes, un revolcón fraternal. - la joven abrió los ojos como platos y empujó a Harry. Este solo se reía.

- Pero qué asco das tío. Yo contigo nada, ni tocarte con un palo.


- Sí si si, pero bien cachonda que te has puesto cuando me he acercado a ti - volvió a pegarse a ella, esta vez más juntos que antes, juntando cadera con cadera.

- Oye Harry, hermoso mío, bandido de mi corazón, ¿te importaría apartarte de una puta vez? Es que me estás echando el aliento en la cara.

- ¿El qué? ¿Esto? - Harry empezó a echarle el aliento en la cara a ella.

- ¡Joder! ¡Qué asco! - tampoco es que oliese mal, es más no olía a nada, solo a aliento, pero Alex estaba más que cabreada por el comportamiento de él. Harry la miraba divertido. De repente oyeron una risa bastante fuerte y que retumbaba por toda la casa. Alex no sabía de quien era, aunque estaba segura que de un chico. En cambio Harry, que conocía muy bien esa risa, sabía perfectamente que era de su amigo irlandés, Niall - ¿Quién ha sido? - preguntó Alex ignorando la cercanía de Harry.

- Nadie - respondió el otro simplemente por el hecho de enfadarla, y lo consiguió.

- Uf, - resopló - te odio. Oye, ¿me dejas salir ya? - repitió con fastidio.

- Espera - dijo Harry teniendo una idea - En muy poco - Alex volvió a resoplar, y Harry, a punto de reírse como un loco, movió la mano derecha lentamente hasta que llegó al trasero de la chica, el cual agarró y apretó descaradamente.

- ¡HARRY! - gritó ella más enfadada que nunca. Iba a soltarle una gran hostia, pero el chico fue hábil y huyó de la habitación a  tiempo, recorriéndose corriendo la casa, a la vez que se reía como un loco. Bajó las escaleras con Alex pisándole los talones, llegando ambos al salón donde se encontraron a tres personas riéndose y a Liam rojo como un tomate.


(...)


Minutos antes del descarado momento entre Alex y Harry, Victoria miró su reloj mientras sonaba Zombie de The Pretty Reckless.
Madre mía, cuanto estaba tardando Alex en traer algo de comer, aunque fuese una simple galleta.

Ya cansa de esperar, e intrigada por si a su prima le había pasado algo, salió del cuarto, y se dirigió al salón, bajando primero por las escaleras.

- Uf, no me vuelvo a poner tanga en mi vida - se quejó mientras bajaba los peldaños, mirando atentamente los pies sin mirar lo que tenía enfrente. De repente oyó un sonido, como de alguien atragantándose. Levantó la mirada y se encontró con tres chicos sentados en un sofá, mirándola atentamente. Supuso que eran los amigos de Harry, pero ¿y Harry? Había dos castaños, uno de ellos con ojos azules, bastante guapo, que seguía las descripciones que había dado Alex de ese tal Louis, asi que supuso que era él. Después el otro castaño, con ojos marrones y nariz respingona, la miraba con el ceño fruncido, como intentando decirle algo con la mirada. Su cara le sonaba familiar, sabía que le había visto en algún sitio, pero no se acordaba de dónde. Ese chico la llamó la atención, no porque fuese guapo o tal, porque los demás chicos también lo eran, pero no la habían inquietado como lo había hecho él. Y es que esa forma de mirarla... Parecía que había algo que ella no sabía, como si hubiese algo que el chico tenía que contarla.


Por otro lado, al chico rubio que estaba comiendo, ya le conocía, y se llevó una gran sorpresa al verle ahí, además fue el primero que se levantó en cuanto la vio.

- ¿Victoria? - dijo él igual de sorprendido.

- ¿Niall? - el rubio sonrió y dejando la bolsa de patatas que tenía, se acercó a ella a abrazarla. Los otros dos miraban atentos la escena. También se levantaron para saludar.

- ¿Os conoceis? - preguntó Louis.

- Sí - habló Niall - Es mi vecina. De pequeños jugábamos juntos cuando era verano. 

- Hace muchos años la verdad - la chica sonrió - ¿Qué haces aquí?

- Soy amigo de Harry, ¿y tú?

- La prima de Alex.

- ¿De Alex la famosa Alex? - dijo Louis.

- La misma Alex.

- Harry no me dijo nada - dijo Niall.

- A lo mejor no sabía que me conocías.

- Cierto.

- Oye, aún no me he presentado, perdón - dijo Louis - Soy Louis - se acercó a la chica y la dio dos besos.

- Yo Victoria. Alex me ha hablado de ti - el susodicho se sonrojó al oír esto.

- ¿En serio?

- Sí, pero no le digas que te lo he dicho, ¿vale?

- Descuida - dijo con una sonrisa enorme. Victoria le miró. Sí, su prima había elegido bien. Era muy guapo. En un acto reflejo, desvió la mirada un poco, fijándose en el chico castaño de detrás, que estaba cabizbajo.

- Y tú eres... - habló Victoria. El chico nos e percató de que le hablaban hasta que Louis le dio un codazo. Entonces se atrevió a mirar a la chica a los ojos, duramente.

- Eh yo eh... Soy Liam - con paso tímido se acercó a ella y le dio dos besos. Sí, definitivamente este chico intrigaba a Victoria.

- Oye, ¿tú y yo nos hemos visto en algún sitio?

- Eh... No - mintió Liam.

- ¿Seguro? Tu cara me suena muchísimo.

- Pues no sé... Quizás por la calle...

- No sé, no creo. - se quedaron unos segundos en silencio. Liam no podía dejar de mirarla. La chica era preciosa, y estaba mucho más guapa que la otra vez que la vio, y era difícil que estuviese más guapa que ese día.

- Pero Liam - dijo Niall de repente alzando la voz - ¿qué es ese bulto que tienes en tus pantalones? - Liam abrió muchísimo los ojos, y poniéndose rojísimo como un tomate, tapándose esa zona del pantalón con las manos. Madre mía, que la tierra le tragase en ese momento - ¡Pero que era broma! - Niall empezó a reírse con una enorme carcajada que retumbaba por la casa, contagiando a Victoria y a Louis la risa. Pero Liam, el pobre, lo estaba pasando fatal, estaba super rojo. Si Niall supiese...



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Holaa, este es mas corto que los demas pero bueno, era para que tuvieseis hoy capitulo
Siento subir tarde, pero es que mi vida es un caos esta semana, asi que lo siento.
No me voy a enrollar mucho, simplemente decir que habeis empezado a ver que las cosas se empiezan a complicar y que uno piensa que va a haber una pareja principal, pero pueden haber terceras personas de por medio y tal
Y bueno, lo segundo es que la semana que viene es la se los examenes:S
Subiré cuando pueda, pero simplemente para que sepais que estare petada de todo, va?
Muchos besos y gracias:)


1 comentario:

  1. Me esta encantando la historia, no puedo esperar a leer el proximo capitulo. un beso:)

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